¡Una ayuda para la construcción, una luz para cada corazón!
Cada ladrillo nos acerca, a la meta, de tener este lugar de consuelo para tantas almas que lo necesitan. Usted tiene la oportunidad de dejar una huella eterna en esta obra, ayudando a levantar un lugar de fe y esperanza.
Con su donación, seguimos avanzando. Estamos en un momento clave de la construcción y necesitamos su apoyo para completar esta gran misión. Su generosidad será un regalo para Nuestra Señora y para cada alma que encuentre en este centro de oración el amor de Dios.
Done hoy y construyamos juntos este hogar para María.